La Unión Europea cofinanciará con una suma total combinada de
más de 72 millones de euros procedentes del programa RTE-T dos proyectos para mejorar la interoperabilidad de un importante tramo del Corredor Ferroviario Mediterráneo en España. Los proyectos, una vez finalizados, contribuirán a la realización de la «Interoperabilidad del ferrocarril de alta velocidad en la
Península Ibérica» (Proyecto prioritatio nº 19 RTE-T)
El primer proyecto, seleccionado para recibir justo por encima de
4,8 millones de euros de financiación en virtud de la convocatoria plurianual
RTE-T de 2012, se refiere a estudios de primera fase. Los trenes españoles
utilizan el ancho de vía de la Península Ibérica, más amplio, que
significa que los convoyes españoles no pueden conectarse directamente con Francia
y el resto de Europa, donde se usa el ancho estándar europeo UIC.
Por lo tanto, convertir la red ferroviaria española al ancho de vía
más ampliamente utilizado presenta extraordinaria importancia.
En ellos se abordará el diseño final para la implantación del
ancho UIC en el tramo entre el nudo de Castellbisbal (al Noroeste de
Barcelona) y Murcia. El tramo, que forma parte del Proyecto
Prioritario nº 19, tendrá al final 340 km de doble vía y 230 km de
vía única.
El resultado de los estudios servirán de base para que las obras
reales empiecen.
El segundo proyecto, también apoyado por el Programa Plurianual
RTE-T con una suma de €68,1 millones de euros, consiste en la
realización de obras para implantar el ancho UIC en un tramo de la
red ferroviaria. El tramo en cuestión, asimismo parte del PP nº 19,
se sitúa entre Castellbisbal y Nud de Vilaseca, cerca de Tarragona.
Las obras abarcan las adaptaciones necesarias en las instalaciones y
elementos de línea para el funcionamiento de trenes de 750 metros en
ancho mixto ibérico/UIC. Se llevarán a cabo a lo largo de 90 km de
vía doble y 7 km de vía única, permitiendo el acceso al puerto de
Tarragona en ancho UIC.
El proyecto contribuirá a impulsar la interoperabilidad e
intermodalidad de la red ferroviaria española, haciendo, al fin de
cuentas, más viable económicamente el transporte ferroviario para
los operadores comerciales.
Ambas iniciativas estarán supervisadas por la Agencia ejecutiva
de la red transeuropea de transporte (AE RTE-T) y se espera se
completen para 2014 y 2015 respectivamente.
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